Imbolc

Conocido también como “Oilmech” en la Irlanda céltica- simboliza el el retorno de la fuerza del Sol y el principio del cambio hacia la primavera. Solía caer en el período en que los corderos nacen y las vacas empiezan a dar leche, coincidiendo con la subida de temperaturas y que los días se alargan -aproximadamente en la Candelaria- sintiéndose los primeros trazos de la Primavera. En zonas montañosas -como los Pirineos- este aumento de temperaturas se experimenta durante el día, siendo los aludes de nieve los principales indicadores de la llegada del inicio de la Primavera.  Así pues, en esta fiesta se celebra el retorno de la fecundidad a la tierra.

Es una festividad muy significativa por ser la promesa de tiempos mejores. El aumento de temperaturas produce las primeras lluvias, que funden parte de la gruesa capa de nieve, los días que se hacen más largos, las primeras tímidas plantas que sacan sus brotes de la nieve, pero sobre todo el nacimiento de los terneros y corderos tal como se ha mencionado… La leche de las hembras del ganado es usada para beber, hacer queso y mantequilla, lo que podría decidir que asegura el porvenir futuro de la comunidad.

Esta festividad consagrada a la diosa Brigid -actual Santa Brigida sin prácticamente grandes cambios en el personaje- se festeja entre el 1 y 2 de Febrero y mediante las ofrendas de leche y lácteos a su imagen o a lugares consagrados a la misma divinidad, o el peregrinaje a manantiales y fuentes sagradas o locales, -dado que Brigid es la protectora de esos lugares- se dan ofrendas de comida y bebida a la fuente o manantial o se le canta y se le escribe poesía. De esta forma queda demostrado el origen de dicha festividad basada en una cultura agrícola, en la cual el invierno representaba la muerte o el descanso de la naturaleza durante los meses oscuros y fríos, el cual iba de la mano con la preocupación de la gente sobre si habría suficientes víveres para sobrevivir, tanto para los hombres como para los animales.

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En la antigua tradición, fuera de los dos rituales mencionados y de un ejercicio espiritual que ya hablaremos en la sección de rituales, no queda rastro de otros rituales; no obstante, a nivel local y en relación directa con la tradición céltica, se suelen hacer cruces y muñecos de paja que se cuelgan en lugares sagrados o en las cuadras, pidiendo una bendición en nombre de Brigit o Santa Brigida -su forma cristianizada, para pedir protección durante todo el año. También se suelen dejar prendas de ropa o herramientas fuera de la casa, para que el espíritu de Brigid las bendiga al pasar por allí.