Los mitos y las leyendas de un pueblo es una forma de comunicación con un alto contenido de enfoque sistémico, las cuales presentan no solamente un concepto universalista basado en la psique y sociología del mismo pueblo, sino que a la vez reproduce diversos patrones que se dan en la naturaleza y que nos transmite el mensaje de que también la Tierra es un ser vivo, dotado de una inteligencia y por tanto con todo los sistemas propios que denotan la misma, a pesar de que en un principio no podamos medirlo en base a nuestros propios patrones de observación. Dentro de las enseñanzas Ecland, dicha percepción se ha tenido muy presente a la hora de definir el concepto de la búsqueda –el cual ya hemos narrado en otro apartado- pero también y a fin de facilitar la propia búsqueda, como herramienta para descodificar el mensaje que nos ofrece la propia Naturaleza, como una forma de comunicación de nuestro planeta y su asimilación por parte de nuestra percepción.
Desde que los seres humanos miramos al cielo, la Luna nos ha asombrado, sobrecogido he inspirado en infinidad de ámbitos, algunos de carácter tan práctico como la aplicación de las fases de la Luna en la Agricultura…Por término general -dependiendo de nuestra latitud y longitud en el planeta y nuestro ecosistema local- la siembra se realiza cerca de la Luna nueva, a fin de favorecer el crecimiento de las plantas. No obstante las diferentes tradicionales rurales no solo se relacionan con la siembra de semillas, sino con aspectos como cuando y como hemos de recoger un fruto o una hoja determinada -por ejemplo si recolectamos manzanas silvestres, en donde me crie es mejor cogerlas con Luna Nueva si es para almacenarlas ya que aguantan más sin pudrirse…hecho que podéis comprobarlo vosotros mismos- Visto desde la Tierra, nuestro satélite es el cuerpo astronómico más cercano que se desplaza a mayor rapidez y recorre el plano zodiacal en 27’32días…
Si tenemos en cuenta aspectos arqueológicos, etnográficos o meramente la observación y percepción de un enclave determinado, observamos que muchos megalitos o ermitas antiguas parecen tener una clara orientación lunar. Para comprobar la veracidad de esta apreciación, solamente tenemos que realizar un sencillo ejercicio, el cual consiste en anotar en un período determinado la salida y puesta del Sol y la Luna con respecto al enclave fruto de la observación y veremos que en la práctica totalidad de casos funcionan como verdaderos hitos astronómicos, presentando a la vez diversas alineaciones con respecto a otros centros. Continuando con nuestro experimento -si este lo ampliamos a toda una estación del año, por ejemplo- veremos todavía más alineaciones como si de un ovillo se tratase y que en la tradición Ecland se ha transmitido como “camins del Drac” -caminos del Dragón- y que fuera de la misma es conocido como “líneas leys”
… pero que son las líneas leys? El término fue acuñado en Inglaterra por el arqueólogo Alfred Watkins, en sus libros Early British Trackways y The Old StraightTrack, quien trataba de identificar rastros antiguos en el paisaje británico y haciendo referencia a alineaciones de lugares de interés geográfico e histórico, en especial antiguos monumentos y megalitos. Posteriormente se han desarrollado teorías acerca de que estas alineaciones -presuntamente para facilitar la caminata por tierra a través de navegación por líneas de visión en tiempos neolíticos, si bien como vemos el sentido de las mismas es mucho más amplio y va más allá de la mera utilidad práctica humana- Posteriormente y ya en los años 70 y 80 del pasado siglo, una investigación del denominado “Drac Project” se descubrió la relación de puntos focales –Vortex- con una serie de anomalías, generalmente de naturaleza electromagnética y su coincidencia con determinados enclaves –tanto naturales como humanos- en especial de lugares considerados como sagrados desde la más remota antigüedad, ermitas, fuentes, megalitos y santuarios precristianos y cristianos, estos últimos generalmente del periodo que abarca desde las primeras manifestaciones de arte paleocristiano hasta bien entrado el gótico en Occidente. El fenómeno no es exclusivo de la Europa Occidental, sino que también lo encontramos en gran parte de Latinoamérica y en el Magreb –este último sustituido por enclaves musulmanes o por templos de antiguas religiones anteriores al Islam- Todo ello con una coincidencia absoluta con diversas formas geométricas, consideradas sagradas pro infinidad de culturas ancestrales y con una equivalencia prácticamente absoluta, con la práctica del “Feng Shui” chino.
A partir de los estudios mencionados, el escritor John Michell revivió el término “líneas ley” y lo asoció con las teorías espirituales y místicas sobre las alineaciones de las formas del terreno, basándose precisamente en el concepto chino del “Feng Shui” y demostrando que supo ejercitar la percepción y observación de determinados enclaves y ver la correspondencia que tenían con respecto a los hallazgos materiales e interacción con la psique humana. Sin embargo, con posterioridad y como suele pasar con disciplinas redescubiertas, diversos autores posteriores “espiritualizaron” el concepto de los mismos, usándose para argumentar diversas corrientes religiosas o de pensamiento englobado en al “New Age”, tales como la ufología, esoterismo o ocultismo, con lo que al margen de poder tener alguna relación concreta con las fenomenología de los mismos, se ha conseguido desvirtuar uno de los mejores redescubrientos del pasado siglo, el cual nos acerca a dimensiones interiores de nuestra psique y nuestra relación con el entorno.
No obstante gracias a la tradición local y concretamente al conocimiento Ecland de los mismos, vemos que precisamente la propia denominación de dichas líneas corresponde con el concepto céltico de lo poco que nos ha llegado de algunas escuelas druídicas y bárdicas, mediante ocultación en mitos y leyendas tradicionales. En las mismas y dentro de la mitología céltica gaélica, se menciona al “Wyvem” –aliento de dragón- como una forma de energía que reside en la Tierra, la cual se deslizaba como una serpiente a través del suelo. Ese aliento nacía del tránsito acuífero de los subsuelos o de las grietas de terrenos que entran en fricción -al igual que de los magmas subterráneos del planeta- Así pues, en la creencia druídica, estas energías serían la manifestación misma de la vida sobre la Tierra y el origen de su fertilidad. De igual modo, creían que esas energías cruzaban los cielos y el interior de la Tierra, a modo de cauces energéticos que, en ciertos parajes concretos daban una condición específicamente benéfica a la acción de las corrientes telúricas del subsuelo, y creaban allí un lugar privilegiado, que coincide casi siempre con menhires o dólmenes de la cultura dolménica. Posteriormente, estos lugares se convertirán en centros rituales y ceremoniales, donde para acrecentar o favorecer esas manifestaciones energéticas, se realizaban danzas, invocaciones y rituales. Así, la creencia era que estos lugares estaban favorecidos por la Naturaleza y las aguas subterráneas -simbolizadas por Dana, la diosa primigenia o la Madre Tierra, otorgadora de la vida y la Serpiente Cósmica, quien sacaba de sí el Huevo Cósmico, repleto de nueva vida y energía- Por tanto, eran zonas de poder donde recibir beneficios físicos, espirituales y emocionales. Era ahí donde los celtas rendían culto a la Diosa, Tierra y demás entidades divinas que albergan las fuentes, lagos, ríos o manantiales y que prácticamente es idéntica a las creencias que se transmite dentro del pensamiento Ecland, extendido a los animales domésticos y los cultivos y a la creencia que son lugares donde reside la gente del otro mundo –Hadas y Duendes-
Después de esta introducción de carácter extenso, a continuación, tenéis una propuesta de un “ley” que se extiende por parte de la comarca del Vallès Oriental y se dirige hacia el “Pla de Barcelona” y más allá…. El itinerario puede comenzar antes o después del punto propuesto, pero personalmente y a pesar de que no se encuentra ubicado en su posición original, recomiendo el dolmén de «Pedra Gentil» en Vallgorguina. La finalidad de este itinerario es que nos permita experimentar y crear nuestra “propia aventura” a la hora de seguir nuestra propia “búsqueda” mediante la exploración de los «leys» y tal vez contribuir con aportaciones inéditas…
Lugar de partida: Dolmén de Pedra Gentil (Serra del Corredor, que separa las comarcas del Vallès y Maresme, en Barcelona)
Desde este punto situado en un pequeño “turó” –cerro-tenemos una visión de conjunto de los bosques que configuran el Parc Natural de Montnegre & Corredor, compuestos mayoritariamente de pinos piñoneros, encinas y sobre todo alcornoques, los cuales prácticamente constituyen la misma vegetación que vio edificar los megalitos de esta zona. Dicho dolmen es uno de los más conocidos de Catalunya, especialmente en su folclore y leyendas relacionadas con brujería –a igual que el vecino pueblo de Vallgorguina- con infinidad de leyendas al respecto y especialmente a la que se refiere a la creación del Santuario del Corredor, que corona el altiplano que da nombre a esta cima. Desgraciadamente es más conocido por rituales esotéricos actuales, los cuales en ocasiones se han acompañado hasta de cobertura mediática televisiva. Próximo al mismo y a unos 250 metros al Este de la masía del Trull –ascendiendo hacia el Santuari del Corredor- en un pequeño cerro, hay otro dolmen y un menhir tumbado, aún sin excavar, ni documentar.
A partir de Pedra Gentil, podemos escoger el itinerario y los medios que queramos, a fin de seguir la propuesta de este artículo –que recordemos que es una propuesta de descubierta, muy accesible y prácticamente al lado mismo de la ciudad de Barcelona- Simplemente marcaré algunos hitos orientativos y los lectores configuráis vuestra propia ruta…
Santa Eulalia de Tapioles. Muy próximo al dolmen de Pedra Gentil y parcialmente reconstruido. Destaca sobre todo la torre octogonal de la misma –arquitectura propia de la orden templaria, en la Edad Media- Es un lugar ideal para ejercitar la observación y percepción sobre un determinado enclave.
Sant Sadurní de Collsabadell. En término municipal de Villalba Saserra, cerca del dolmen de Pedra Arca. Templo románico el cuál fue posesión templaria en 1135 y conserva una estructura cisterciense primitiva. En el templo se rinde culto a la “Verge de la Bona Sort”, cristianización de una deidad local.
Dolmen de Pedra Arca o Llinars. Situado en Llinars del Vallès, en el inicio de la Vall del Mogent, en un llano cerca del camino de “Can Adrià” y bajo un inmenso pino piñonero. Es un dolmen de planta rectangular, con una losa de cobertura en buen estado.
Cromlech de Pins Rosers. Situado dentro del recinto de tratamiento de aguas de la empresa “Aigues del Ter Llobregat” en Cardedeu. Compuesto en la actualidad por tres piedras erguidas y ocho tumbadas y en alineamiento con el anterior dolmen. Obviamente hay que pedir permiso de visita a dicha empresa.
Massís de Cellecs. Se trata de un pequeño macizo montañoso granítico cubierto de bosques de encinas y robles, en el Parc de la Serralada de Marina –siendo su punto más elevado con 536 metros de altitud- entre los términos municipales de Orrius y Vilanova del Vallès y al SE del riu Mogent. Por la cantidad de enclaves megalíticos que tenemos en un macizo tan pequeño, ya queda sacrilizado que en la antigüedad fue considerada montaña sagrada. En el mismo podemos encontrar los complejos megalíticos de Can Gol I y II, la Pedra Foradada, la Pedra de les Orenetes, la Pedra de les Creus, la Roca del Moro, etc…
En su base y justo a la altura de la finca de “Ca l’Argenter” –en la carretera de la Roca del Vallès a Orrius- encontramos una serie de esculturas, las cuales los aficionados del esoterismo han buscado vinculaciones con infinidad de teorías alternativas y posibles “ooparts”. Se trata de la denominada “Roca de l’Elefant” , “L’Indi” y un Moai tipo isla de Pascua. Cabe decir que a pesar de que el enclave a mí personalmente me da una percepción especial, fue obra de un escultor de Granollers en el pasado siglo, sin que sepa muy bien su identidad y si fue realizado en los años 30 o en los años 60, tal como indican disparidad de fuentes locales.
Dolmen de Can Planes. En el término municipal de la Roca del Vallès y de medidas más bien reducidas, pero en buen estado de conservación. Cerca de la misma se encuentra la “Pedra Marxant” o “Pedra Foradada”, idéntica a la de Cellers aunque más reducida.
Pedra de l’Escorpí. Situada cerca de las anteriores, se localiza en la zona denominada “Replana de Can Planes”, cerca de la casa del mismo nombre y por el camino que va a la ermita románica de Sant Bartomeu de Cabanyes. Se trata de una pequeña cavidad entre rocas de granito en donde se ha localizado diverso ajuar funerario del Neolítico y Primera Edad de Bronce y diversos exvotos y ornamentos motivos
Cau de la Mostela. Se trata de un “paradolmen” –relieve natural aprovechado como tal, también conocido como “tolmén”- situado en las afueras del Polígono Indústrial de Can Font de la Pareda –Santa Agnès de Malanyanes- siguiendo la carretera carretera BV5103, que va de Cardedeu a Dosrius. Cogiendo las indicaciones de la Parroquia de Sant Esteve del Coll y de LLinars del Vallès, a unos 250 metros vemos a nuestra derecha otra carretera que seguimos medio kilómetro hasta pasar una casa de campo. Justo pasada la casa cogemos una pista forestal a la derecha, que seguimos rectos hasta una bifurcación. Aquí tenemos que coger el camino de nuestra derecha y pasada una pedrera, vemos unas rocas a nuestra derecha, que en unos 100 metros nos lleva al lugar…
….hasta aquí el itinerario propuesto. El mismo continua en dirección a Collserola y el Pla de Barcelona -una pista, antiguamente en Catalunya, los dólmenes recibían el nombre de Arcas- y más allá… no obstante la continuación del mismo es vuestra propia «aventura» o búsqueda particular, si estáis interesados en dicha disciplina y además, seguro que aportareis nuevos descubrimientos o cosas que han pasado por alto y están relacionados con dicho «ley»…
Ecland Sabiduria Ancestral 